Preguntas Frecuentes
Todo lo que querés saber antes de comenzar tu cuidado quiropráctico
La quiropraxia es una rama de las ciencias de la salud que se encarga de mejorar y mantener el buen funcionamiento del sistema nervioso, con ello logramos mantener el cuerpo en un estado óptimo. Para ello los quiroprácticos evalúan toda la columna vertebral buscando una o varias vertebras desalineadas (le llamamos Subluxación vertebral) las cuales comprimen las raíces nerviosas generando diferentes condiciones de salud en las personas.




Preguntas Frecuentes
Un ajuste quiropráctico es una técnica específica y segura aplicada sobre la columna vertebral. Su objetivo es corregir interferencias en el sistema nervioso que pueden afectar tu salud y bienestar general.
No. La mayoría de las personas sienten alivio o una liberación inmediata de tensión. Es una técnica suave y controlada, adaptada a cada paciente.
Cada cuerpo es distinto. Luego de la primera evaluación, el profesional te indicará un plan personalizado, según tu caso, tus hábitos posturales y tu estilo de vida.
Sí. La quiropraxia no solo se usa para tratar dolencias, sino también de forma preventiva. Mejora tu postura, energía, concentración y descanso, incluso si no tenés síntomas.
Totalmente. Adaptamos las técnicas según la etapa del embarazo. Mejora el equilibrio pélvico, reduce el dolor lumbar y ayuda a tener un parto más alineado.
Sí. La quiropraxia es segura en todas las edades. Los ajustes son suaves y se adaptan a la estructura corporal de cada persona.
Incluye una entrevista detallada, evaluación postural, tests ortopédicos y si corresponde, el primer ajuste. Buscamos conocer a fondo tu caso para trabajar en tu bienestar desde el primer día.
No es obligatorio, pero si tenés resonancias, radiografías u otros estudios recientes, pueden ser útiles para complementar tu análisis postural.
Acá hay que aclarar algo muy importante. El dolor de espalda es solamente un síntoma, y no es el problema real. Obviamente no es lindo tener dolor de espalda por eso es muy común recurrir a analgésicos para tapar el dolor, pero como es un síntoma, puede tener diferentes orígenes, éstos son algunos problemas que pueden generar dolor de espalda:
Hernias de disco, protusiones, escoliosis, artritis.
Contracturas musculares
Compresión e irritación nerviosa.
Estrés y ansiedad.